Para
ser original en la cocina no es necesario utilizar ingredientes estrafalarios
ni técnicas rebuscadas.
Esta
receta de huevos con chorizo y cebolla confitada en un cesto de hojaldre es muy
fácil de elaborar, sabrosa y resultona.
Primero,
corto la cebolla en juliana y la pongo
a fuego lento en una sartén con un chorrito de aceite de oliva y un pellizco de sal.
En
cada molde para magdalenas coloco un cuadrado de hojaldre (puedes hacerlo tú, pero yo utilizo el de Lidl y es muy
bueno), pincho un poco la base para que no suba demasiado y lo meto durante 4 ó
5 minutos en el horno a 180º.
Cuando
la cebolla esté confitada (tiene que estar blandita y con un color dorado) la
pongo dentro del hojaldre, encima coloco unas rodajas de chorizo ibérico cortado fino, el huevo (no le pongo toda la clara) y un poquito de sal sobre la yema.
Después
lo meto en el horno a 180º durante unos 5 ó 6 minutos, y lo desmoldo con
cuidado.
Este
es un bocado muy versátil, que sirve para poner como canapé, como acompañamiento
con un planto de verduras, para un desayuno americano, en un buffet…
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