Croquetas caseras de jamón serrano

Hoy 16 de enero es el Día Internacional de la Croqueta.

La croqueta es un plato típico español que se ha convertido en la reina del tapeo. Hay una inmensa variedad de sabores de croquetas y también pueden presentarse de diversas formas que van desde las clásicas croquetas cilíndricas a las redondas, pasando por el famoso croquetón gigante del Chiringuito de Pepe.

Pero por más que se innove, para mí la estrella sigue siendo la clásica croqueta de jamón serrano.

Para hacerlas procuro conseguir en el supermercado una punta de jamón serrano bueno de unos 250 gramos.

Pico bien pequeña una cebolla y la pocho en aceite de oliva virgen extra con un pellizco de sal. Después agrego una cuchara de mantequilla y cuando se derrite incorporo 100 gramos de harina tamizada. La rehogo bien para que no tenga sabor a harina cruda, removiendo sin parar.

Pico el jamón serrano y añado la mitad a la olla. Vierto un litro de leche, ralladura de nuez moscada, un poco de pimienta y un pellizco de sal, y cocino la bechamel durante unos 15 – 20 minutos sin dejar de remover para que no se pegue.

Después le paso la batidora para que la textura de la bechamel me quede cremosa y sin grumos, y luego le añado la otra mitad del jamón serrano y lo remuevo con una cuchara.

Dejo que la masa se temple y la meto en una manga pastelera en la nevera hasta que se enfríe bien.

En un taper rectangular pongo abundante pan rallado, y en otro bato unos huevos. Con la manga pastelera voy haciendo churros de masa sobre el pan rallado, los meneo para que se impregnen bien y los corto en trozos. Los paso por el huevo y después otra vez por el pan rallado.

Es importante freír las croquetas en aceite bien caliente para que no se abran, y escurrirlas luego con papel absorvente.

Las croquetas pueden guardarse en el congelador y sacarlas justo antes de freir.

Sin duda, la croqueta es un plato que se merece un homenaje.

¡Feliz Día de la Croqueta!